La fisioterapia busca la prevención, diagnóstico, tratamiento y recuperación de enfermedades y lesiones mediante movilizaciones, masajes, estiramientos y un sinfín de técnicas manuales, aunque también se apoya en otros agentes físicos como el agua, temperatura, electricidad, etc.
Deportiva
Contracturas, roturas de fibras, tendinopatías, afectaciones meniscales, fascitis.
Traumatología
Fracturas, luxaciones, esguinces, dolores de espalda (cervicalgias, dorsalgias, lumbalgias, ciáticas...), escoliosis, rehabilitación tras accidentes de tráfico.
Geriatría
Mantenimiento movilidad y fuerza muscular, mejora de la marcha y equilibrio.
Postquirúrgicas
Rehabilitación general tras intervenciones quirúrgicas.
Neurología
Hernias discales, afectación de raíces nerviosas, hemiplegias.
Reumatología
Artrosis, artritis, afectaciones inflamatorias y degenerativas en general.